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jueves, 28 de marzo de 2024 08:29h.

Enoc Suárez: un Canarión con alma gomera

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Describe sus años de trabajo en las isla como, “un lugar que me acogió con los brazos abiertos, en la que me he sentido totalmente integrado, como si hubiese tal vez nacido allí, sintiéndola como mía”.

Dicen que para que exista mundo, una de las condiciones es que en él “exista de todo”; claro que no me negaran que siempre es más grato leer o escuchar cosas agradables y sinceras  de tu pequeño terruño que, “alguna parida” dicha por boca de “algún trasnochado” o de alguien que busca un minuto de oro sin importarle las consecuencias.

Como quiera que en su momento,  desde este mismo Medio nos hicimos eco de un episodio que unió el sentimiento legítimo de los gomeros y algunos de otras islas para defender la isla; hoy toca trasladarles a ustedes parte de un extenso relato  en el que , Enoc Súarez, un joven de Gran Canaria y que trabajó durante varios años en el Hospital Insular Virgen de Guadalupe de la Gomera, muestra su agradecimiento y cariño a una tierra que le conquistó el corazón.

Dice Enoc , entre otras cosas que,    nunca olvidará ese primer verano en el Nuevo Hospital de La Gomera que por aquel entonces, tuvo la suerte de estrenar, en el que aprendió mucho tanto profesional como personalmente.

Describe a nuestra isla como un lugar plagado de verdes bosques, húmedos y cargados de agua como una esponja arbórea que cambia constantemente, pero nunca pierde su belleza milenaria . Montes en los que perdernos juntos caminando y disfrutando de la naturaleza. 

Dice además que,  por desgracia , un fatídico verano pude ver de cerca cómo se destruía parte de ellos arrasados por las llamas y haciendo trasladar a más de la mitad de la población de isla a la capital. “Esos días pude contemplar, experimentar y compartir  la solidaridad, la humildad y la simpatía de todos los gomeros. Que se volcaron ante tal desgracia” .-Relata.

Continúa su relato señalando que,  “No puedo quejarme profesionalmente hablando de estos últimos años, pues he coleccionado experiencias y conocimientos amplios. He vivido la EnfermerÍa de guerrilla, como decimos los que allí trabajamos. Pues con pocos medios, se abarca mucho. He pasado por un largo etcétera  de servicios, planta, urgencias, quirófano, rayos, paritorio... y por supuesto,  la ruta gomera del bakalao; todas las zonas básicas de salud y sus pequeños y tan lejanos consultorios : Las Rosas, La Dama, Arure, Chipude, Alojera, etc”.

Se despide afirmando que,  nunca olvidará lo vivido en una isla que le acogió con los brazos abiertos, en la que se ha sentido totalmente integrado,” como si hubiese tal vez nacido allí, sintiéndola como Mia.  La Gomera siempre estará presente en mí y guardare gratos recuerdos"