Para cualquier Domingo de Ramos
Jerusalén, perseguida:
¡Quién te ha visto y quién te ve!
Por el Señor, conocida,
continuarás oprimida,
sin procurarlo entender.
Montadito en su burrita,
va el Rabí de Galilea
que, entre devoción bendita,
ameno marcha a la cita,
para que el Pueblo, le vea.
Vuelan ramitas de olivos
y, flores de primaveras.
¡El que de Dios es el Hijo,
a su cortejo le dijo
que, le brindaran palmeras!
A este joven nazareno,
le han fabricado su cruz.
¡Sabiendo de carpintero,
quiso guardar un madero,
con el nombre de Jesús!
El Profeta de Judea,
realizó grandes portentos.
¡Perseverante tarea,
para que muchos le crean,
impidiéndole tormentos!
Lisonjeado por doquier,
entre alabanzas divinas.
¡Muy pronto será al revés
y, tendrá que fenecer,
portando, un cerco de espinas!
Es la falsedad del mundo
que, a este Cristo le ha tocado:
¡Ahora, un respeto fecundo
y, raudo, un odio profundo,
con castigo exagerado!
Abandonos en la vida,
se presentan por doquier.
¡Mientras estemos “arriba”,
tendremos la mano amiga,
que nos sepa socorrer!
Porque, si estamos enfermos,
y dinero, tú no guardas,
huirán como conejos,
para marcharse muy lejos
y volverte las espaldas!
¡El que ahora es aclamado,
entre cánticos de gloria,
por ladrón será cambiado,
para ser crucificado,
entre perversos de historia!
APRENDAMOS LA LECCIÓN
QUE, EN ESTE DIGITAL, DESTACO:
HOY, TE LLAMAN, “CAMPEÓN”
Y, MAÑANA, SIN COMPASIÓN,
¡TE VENDERÁN EN EL RASTRO!