A veces, mis atentos amigos de GOMERAACTUALIDAD, nos extrañamos, cuando se nos apuntan cosas  que nos llaman fuertemente la atención, tal vez, por lo inesperado de las mismas, siendo ellas de tal índole que, suelen colmarnos de natural estupefacción, chocante desconcierto o confusa incredulidad.

Por un largo espacio de tiempo, mal notificado por cierto, hasta hoy mismo, creí  QUE, YA, había traspasado la otra lejana orilla del más allá, este admirado trovador  tradicional del que, seguidamente, glosaremos.

No hace días, entre los impenetrables humos de la duda o, entre las directas luces de una increíble certeza, vengo a enterarme de que, el popular artista de la canción, MARC ANTHONY, viene a ser oriunda semilla de mi muy admirado “Embajador del Romanticismo”, MARCO ANONIO MUÑIZ,¡vivito y coleando todavía! y, que de ahí, le procede su nombre al neoyorquino, de ascendientes portorriqueños y, aquí, es donde se contradice el informador  porque, por una parte, “si afirma ser hijo de MUÑIZ, y, por otra, que sus progenitores eran portorriqueños”, ¿cómo intentar explicar este misterio, ya que, MARCO ANTONIO, es mejicano, por haber nacido en Guadalajara, un 3 de marzo de 1.933?

Al parecer, también existe la remota posibilidad  de que el pillín de MUÑIZ, haya tenido su traviesa aventurilla amorosa con alguna linda nativa de aquellas  sudamericanas latitudes. ¡Vayan ustedes a saber!

El azteca, que yo sepa, nunca ha dado muestra alguna de paternidad hacia este consagrado virtuoso, algo que resulta dramáticamente patético y ridículamente confuso. 

Probablemente, todo cuanto hasta aquí hemos mencionado, vienen a ser simples habladurías sensacionalistas, para inundar páginas  rosas, algo que, hoy en día, tanto gustan y, abundantemente, proliferan.

A pesar de todo ello, mi enorme  admiración,  por este acreditado intérprete, poseedor de una voz con tesituras de deslumbrante barítono, - algo que le ha permitido dominar con soltura  unas poderosas notas graves de admirables tonalidades -, en absoluto, ha dejado de menguar en mí,  ni en el más mínimo de los  ponderados ápices.

Ya, con 81 años sobre las espaldas, se ha despedido de la pública vida artística, dejándonos múltiples de sus escuchadas creaciones en sendos discos, todos ellos, plagados de inolvidables canciones perdurables.

¡Tuve el favorecido placer de haberle podido conocer personalmente en Caracas, cuando, actuando en la Televisión Venezolana, en todos los ámbitos, supo difundir una exuberante  simpatía, sobrecargada de  humilde naturalidad y  pegadiza sencillez!
 
A acerca de lo que ya hemos mencionado,  no puedo dejar que se ahogue en el fondo del tenebroso tintero, la otra discutida paternidad, correspondiente al mítico torero,  MANUEL BENÍTEZ, el “VIEJO CORDOBÉS”, el auténtico veterano de los ruedos, que nunca ha querido reconocer a un hijo, fuera del matrimonio, que anda suplicándole el que, al menos, le otorgue un simple saludo, una somera muestra de cariño o, un mero noble rasgo de amistad. 

¿Hay algo más triste y espeluznante que eso?

Muchas veces, nos quejamos de falta de amistad ¡Cómo sería si se invirtieran los términos  y fuesen falta de PATERNIDAD!

Un fiel  mal ejemplo de ello, son los tan aparecidos casos de esos, casi caníbales “papaítos”,  lucrándose  de poder brutalmente poseer sensitivas carnes, al violar a sus propias hijas, o de aquellos otros que les privan hasta de la misma sagrada existencia.  

Vamos a dejar este asunto y, por ser casi de idéntica similitud, pasemos al de la AMISTAD, algo que jamás será tan peligroso como el otro, a pesar de tener muchas clases diferentes de graves problemas a tratar.

¡Cuántos penosos desengaños, muchos de nosotros, no nos hemos llevado, con una enorme cantidad de personas, a las que creíamos y tratáramos como compañeros y, en un abrir y cerrar de ojos, sin  aparentes motivos algunos que lo justificasen,  de la noche a la mañana, en un incomprensible mal periquete, se nos han esfumado! 

¡No hay nada más grande que la AMISTAD pero, de tanto indicarla, podríamos llegar a malgastarla, más allá de lo útilmente beneficioso y positivo!

Esta aterradora frase, ha sido tomada de una persona que, al morir, había dejado escrita  en un papel, en el que decía:

-.-  ¡MI CASA ES UN INFIERNO, MI VIDA ES UN ABISMO¡
      YO, YA NO PUEDO SEGUIR VIVIENDO  ASÍ.
      NADIE ME COMPRENDE.
      NADIE ME HA HECHO FELIZ.
      NADIE ME HA HECHO REIR.
      NADIE ME HA DADO AMISTAD.
      ¡QUE NADIE ME LLORE MUERTO!

¡Se había envenenado!

¡Cuánta gente es despreciada! ¡Cuánta gente no es tenida en cuenta!

Estamos tan metidos en nuestros propios problemas que, no somos capaces de pensar en las contrariedades  de los demás!

¡Resulta tan fácil y barato el procurar sonreír a los demás, animar a otros, respetar y preocuparnos por muchos que, tanto y tanto, lo necesitan!

¿Por qué tanta gente se suicida en el mundo?

¿Por existen tantas personas tristes?

¿Por qué andan mal viviendo, una enorme cantidad de dolientes desesperados?
 
Tal vez, quizá, por pura falta de cariño, por la negativa ausencia de un verdadero AMIGO; por desapegado menoscabo de alguien que les dedique un poco de tiempo, haciéndoles dichosos.  

A lo largo de nuestra vida… ¡cuántas desilusiones, cuántos desengaños, cuántos chascos, cuántas hipocresías, cuántas risas falsas, ¡cuántas y cuántas traiciones!

¡Nunca cesan las guerras, los odios, el terrorismo, las divisiones entre hermanos, la hipócrita falsedad de verdaderos padres que no quieren reconocer a sus hijos; de locas madres que, recién nacidos, los abandonan a las concurridas puertas de cualquier bar o, en los sucios  fondos de los malolientes contenedores de basura!

¡Qué maravilloso es tener nuevos amigos!

¡Qué dura tiene que ser la existencia y amarga, sin compañeros!

Vale más la atención y la comprensión de un verdadero amigo, que la consulta al mejor de los siquiatras.

¡Desdichado es el que no tiene amigos, aunque le sobre el dinero y disfrute de todo! 

Estamos habitando en una sociedad en que todo es consumismo, donde cada uno va a lo suyo y le importa tres pepinos, los problemas que tengan los demás.

Vivimos al…”sálvese quien pueda”.

Cada uno de nosotros, va por su lado.

Con la fama, la que, a manos llenas, ya tienen los artistas citados en  nuestro atrevido comentario de hoy, se compra muchísimas cosas  pero, no se pueden comprar AMIGOS DE VERDAD.

Con dinero, lo más que se puede adquirir, son FALSOS ADULONES Y ASTUTOS APROVECHADOS.

¡Qué desilusión tan grande, cuando alguien cree que le aprecian, que le estiman y, descubre que lo que quieren de él, son sus cosas, sus intereses y, cuando ya no son nadie, ni nada tienen, se quedan más solos y abandonados que la renombrada Luna de Valencia!

los VERDADEROS amigos son para las alegrías y las penas, en la salud y enfermedad, en las verdes y en las maduras.

¡todo el tiempo de la vida!

 No basta un golpe en la espalda, ni siquiera una sonrisa.

la amistad es algo más.

¡qué triste es no tener a alguien  que, de corazón, nos diga de verdad, con toda el alma:

-.- ¡hola, compadre!

ASÍ, LA VIDA ES MÁS BONITA Y MÁS ALEGRE, CUANDO SE COMPARTE CON CAMARADAS, POR LO QUE HEMOS DE LUCHAR PARA SER ABIERTOS, PARA CONFIAR EN LOS DEMÁS, PARA SER DELICADOS Y NO GROSEROS.

¡HAGAMOS DE LA VIDA UNA FIESTA!