Curbelo traslada al Ejecutivo canario la urgencia de activar medidas para frenar la carestía del combustible

El presidente del Cabildo remite un escrito al consejero de Transportes, Sebastián Franquis, para crear una comisión entre Gobierno, cabildos y empresas distribuidoras, con el fin de aportar soluciones efectivas 

El presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, ha pedido, este viernes, la creación de una comisión entre el Gobierno de Canarias, los cabildos de las Islas Verdes y las empresas distribuidoras de combustibles para abordar el incremento de los precios en las islas occidentales. Curbelo trasladó esta propuesta a través de un escrito dirigido al consejero de Transportes del Ejecutivo regional, Sebastián Franquis. 


La situación que padecen estas islas con el precio de los combustibles ha llegado a un punto de inflexión esta semana, al registrar el máximo histórico en los precios de la gasolina y diésel que se surte en la isla. Desde este martes, el litro de gasolina 98 se sitúa por encima de 1,27 euros, por lo que llenar el tanque de un vehículo supone un gasto de hasta 15 euros más que en Tenerife. 


“Hay que buscar soluciones a esta realidad porque las propuestas que se han puesto sobre la mesa hasta ahora no han dado resultados. Sabemos de la existencia de informes que desaconsejan subvencionar el combustible en estas islas, pero alguna certeza hay que aportar a una realidad que se antoja cada vez más compleja”, dijo Curbelo, quien recordó que desde la pasada legislatura ha abordado esta problemática en el Parlamento de Canarias. 


El dirigente insular, insistió en la coordinación entre administraciones y empresas suministradoras para aportar una salida satisfactoria a los ciudadanos de estas islas que ya sufren las consecuencias de economías dañadas por la pandemia y que son más débiles por la dependencia que tienen de un combustible cada vez más caro. “Este es un problema que afecta a la vida diaria de las familias y que necesita de esfuerzos conjuntos”, aseveró.


Asimismo, precisó que ya el Cabildo insular renunció a aplicar impuestos a los carburantes para aliviar la presión que provoca en los bolsillos de los ciudadanos los elevados precios, agotando la única vía de la que dispone la Institución para hacer frente al problema. “Desde el primer momento actuamos, ahora insistimos en alcanzar acuerdos satisfactorios que repercutan en el descenso de las tarifas, ya que vienen creciendo entre un 61% y un 72% desde 2006”.