Profecías para entretener…o para tomar en cuenta.

Por Luis Manuel González.-Dicen que a todo aquél que indaga por el futuro, o le corroe el miedo o le devora la ambición. Por ello los agoreros y adivinos tienen tanto éxito y más de uno se ha ganado la fama de certero. Claro. Después de vaciar el bolsillo del consultante.

Por Luis Manuel González.-Dicen que a todo aquél que indaga por el futuro, o le corroe el miedo o le devora la ambición. Por ello los agoreros y adivinos tienen tanto éxito y más de uno se ha ganado la fama de certero. Claro. Después de vaciar el bolsillo del consultante.
Pero esta vez saltaremos de lo individual a lo colectivo y repasaremos una de las liturgias que se practican invariablemente desde hace siglos en el complejo ritual Osha-Ifá, primero en Africa y más tarde en Cuba, y que consiste en obtener el vaticinio para los siguientes 365 días a través de la “Letra del Año”.
Los Babalawos (de Babá, padre, y Awo, saber; Padre del Saber o Conocimiento) determinaron para 2013 que será un año propicio para la agricultura y también para los Jueces, porque no les faltará el trabajo. Y no es así porque sí, sino que “gobiernan” este año las deidades Orishaoko y Oshún, reunidos “fortuitamente” bajo el signo, u Oddun Ifá, Obara-Iká. El primero rige sobre la fertilidad en general y del campo en particular y la segunda sobre la Justicia. Coincidentemente, en Obara-Iká “nace” el refrán “En la Tierra no hay Justicia Divina”. O sea, sólo la de los hombres.
La Letra del Año es una ceremonia compleja que comienza desde varios días antes, pero su punto culminante es la consulta oracular en la medianoche del 31 de Diciembre al 1º de Enero en la que decenas de Babalawos, tras una intrincada manipulación de elementos y una elaborada liturgia, “interpretan” el signo conseguido en el momento más cercano al cambio de año. Hablan por turnos desde el más joven (menos años de consagración) hasta el más antiguo, obteniendo así una elaboración de las ideas bastante acabada, pulida, de lo que el Oddun promete, augura o advierte.
Obara Iká pronostica también para este año una buena salud física en general, pero alerta sobre no dejarse llevar por el estrés porque entonces acudirán enfermedades del hígado y la tensión, así como que las personas comenzarán a automedicarse y a tomar fármacos vencidos, lo que acarreará grandes complicaciones. (En España esto podría tener sentido tras el euro por receta, el cobro de consultas y la privatización de la Sanidad).
Las bolsas mejorarán (esto ¿será lo mismo el Ibex, el Nasdaq y el NYSE que las privadas?) y habrá una mejoría general de las economías (¿nacionales o particulares?) y habrá cambios sustanciales en la vida de muchas personas. (Aquí no precisan en cuál dirección. Bastante incertidumbre, digamos. Esperemos que sea en sentido positivo).
Otros augurios son el aumento de fenómenos climatológicos, de la violencia machista, y de las trampas en asuntos legales, así que hay que prestar mucha atención a todo lo que se firma, así como mantener una actitud bien alerta con los menores pues crecerá también el tráfico de estupefacientes y habrá una escalada en el empleo desenfrenado de las armas.
Pero en Osha-Ifá todo tiene solución -¿cómo, si no?- y para librarse de cualquier mal o contratiempo recomienda “Darle de 'comer' al techo”. Y ya esto escapa a una corta comprensión. Como la de cualquier no iniciado.
Antes de acabar, haga como muchos: guarde estas notas a ver cuánto de lo escrito se habrá cumplido el 31 de diciembre de 2013.