Los bancales y el papel mojado

"Porque, está muy bien ofrecerte como sede y propiciar estudios sobre los territorios aterrazados, pero la realidad es que la ruina es su cara más visible" 

 

He leído hace unos días que La Gomera se prepara para acoger el IV Congreso Mundial ITLA-Terrazas y Bancales, evento que tendrá lugar en marzo de 2019. La noticia me parece estupenda. Es necesario poner en valor un paisaje extraordinario como nuestros bancales, hechos gracias al esfuerzo de muchísimos gomeros que lucharon contra la orografía para levantar estos muros para cultivar.

Sin embargo, me llama la atención que siendo como es La Gomera una isla-terraza con centenares de bancales jalonando nuestras laderas, estén prácticamente en su totalidad en el suelo o abandonados. Porque está muy bien ofrecerte como sede y propiciar estudios sobre los territorios aterrazados, pero la realidad es que la ruina es su cara más visible. 

Por supuesto que los tiempos han cambiado y ha tenido mucho que ver la emigración y el abandono paulatino de la agricultura pero, ¿qué ha hecho el Cabildo en materia del sector primario más allá de subvencionar? La Gomera es la isla de la subvención. Para todo hay ‘perras’, pero no para lo que importa, que son las ideas. ¿Cómo podemos de verdad rehabilitar y dar vida a nuestro paisaje? Es esa la pregunta que tendríamos que hacernos antes de sacar un proyecto o invertir –ya lo verán, si no tiempo al tiempo- miles de euros en reconstruir decenas de bancales. ¿Tiene sentido si previamente no le buscamos un uso?

Me parece un erro lanzarse a la piscina sin tener las cosas claras. Debemos apostar por la agricultura, por el sector primario. Pero hacerlo de verdad, no sólo con subvenciones. Fomentemos el asociacionismo, la apuesta por la agricultura ecológica, por la comercialización de verduras y frutas bajo la marca ‘Alimentos de La Gomera’, implantemos mercadillos del agricultor, impulsemos los huertos sociales derivados de la rehabilitación de bancales.

Lo que debemos es construir un futuro real y factible para el sector primario. Y apostar por fomentar los bancales gomeros como Paisaje Cultural de la Humanidad bajo el abrigo de la UNESCO, y tener de una vez las cuatro distinciones: Reserva de la Biosfera, Patrimonio Natural y Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Todo lo que no sea un proyecto concreto quedará, tras el Congreso, como casi todo en La Gomera, en papel mojado.