Casimiro Curbelo también anunció que esa ampliación incorporaría también la finca del Helechal y la zona montañosa de Juel.

“ Lo cierto es que, cuando han pasado ocho años desde esa celebración, esas promesas se han quedado en nada”, manifiestan desde Sí se puede, “y ello por la dejadez del Cabildo, que en 2006 pudo haber ejercido el derecho de tanteo y retracto cuando se puso en venta la finca de Enchereda y no lo hizo”.

Según la organización de izquierdas, “esa actitud pasiva ha sido denunciada en diversas ocasiones por algunos representantes del Patronato del Parque Nacional, por no velar por el interés social y la conservación de estos lugares y por ignorar los acuerdos y recomendaciones de este órgano colegiado” y recuerdan que desde los grupos ecologistas gomeros se viene insistiendo en la necesidad de que se produzca esa ampliación prometida.

Sí se puede insiste en denunciar que estas zonas, donde se instalan bosques de laurisilva de notable riqueza y madurez, así como un elevado número de especies endémicas, siguen siendo privadas, “y lo que es peor, están más amenazadas que hace ocho años”, poniendo como ejemplos que el Cabildo Insular no ha sabido resolver el problema del ganado asilvestrado, “que está causando graves daños ecológicos es esas zonas o la construcción de instalaciones hoteleras de forma ilegal en sus inmediaciones (Enchereda)”. 
“Esto lo que nos demuestra no es solo la falta de sensibilidad mostrada en todos estos años por los dirigentes del Cabildo Insular hacia la conservación de la naturaleza, sino que lo único que le interesa en estos asuntos medioambientales es la propaganda”, afirmaron desde Sí se puede.

Desde la organización ecosocialista gomera se abunda en que en la celebración del 25º aniversario de la declaración del Garajonay como Parque Nacional, el presidente del Cabildo también abogó por declarar Patrimonio de la Humanidad a toda la Isla, “otro brindis al sol, ya que solo o hay que analizar la realidad para darse cuenta cómo no se ha avanzado lo más mínimo en desarrollar políticas realistas enfocadas a la protección del territorio, sino que muy al contrario se han potenciado y permitido actuaciones que permiten la destrucción de espacios: desde deficiencias extremas como la ausencia absoluta de gestión en la Red de Espacios Naturales Protegidos, en la Red Natura 2000 o la proliferación de ganado asilvestrado, a casos más concretos pero no menos graves como el vertedero de escombros de Punta La Vaca”. 

La Coordinadora Insular de Sí se puede insiste en que “toda esta improvisación y la ausencia más absoluta de gestión política del territorio insular quedaron en evidencia en el verano de 2012, cuando por una negligente actuación del gobierno insular se permitió la extensión de un incendio que afectó a 4.100 hectáreas de la Isla, 900 de ellas en el interior del Parque”, criticando que “a este paso la obtención de la figura de la Reserva de la Biosfera, único logro de estos años, puede verse seriamente perjudicada por la nula gestión del Cabildo Insular en lo que se refiere a la ejecución del Plan de Acción, gracias al cual, además de por su naturaleza y su patrimonio cultural, La Gomera obtuvo este reconocimiento”.